Según un artículo publicado la pasada semana en el sitio Engadget, una acción civil iniciada en el 2005 contra Apple llegó finalmente a un acuerdo. La acción legal se basaba en la facilidad con la que la pantalla del primer iPod nano se rayaba.
En el momento en que surgió la demanda Apple intentó afirmar que la cuestión no era un problema generalizado, sin embargo para principios del 2009 la compañía acordó un pago de u$s 22.5 millones de dólares. La demanda estimaba que cada demandante recibiría un compensación de entre u$s 25 y u$s 15 dependiendo si el dispositivo incluía o no una funda protectora.
La suma total del acuerdo debía repartirse entre los participantes de la demanda sin exceder un 150 % de lo estimado per cápita (u$s 25 y u$s 15 respectivamente) Al parecer los demandantes no eran tantos como originalmente se había pensado lo que llevo a algunos a recibir cheques de $37.50, la máxima suma posible dentro del acuerdo.
Sin embargo el dinero que están recibiendo los demandantes como parte de la compensación es un vuelto, comparado con la suma que cobrará la firma de abogados que llevó adelante la acción legal. La firma de Steve Berman, abogado a cargo de la demanda, recibirá unos 4 millones de dólares en honorarios.