Google utiliza una técnica de dudosa legitimidad para que sus publicidades puedan seguir los movimientos de los usuarios del navegador Web Safari de Apple, incluso cuando la configuración de privacidad de este navegador por defecto impide este tipo de seguimiento.
Este comportamiento ha sido descubierto por Jonathan Mayer, un investigador de Stanford, y publicado en el Wall Street Journal.
Lo que hace Google y otras compañías de publicidad es engañar al navegador Safari para hacerle creer que el usuario ha enviado una solicitud asociada con la publicidad. Esto les permite eludir las preferencias de privacidad del usuario y colocar una Cookie en el dispositivo y así poder seguir al usuario.
Por defecto el navegador Safari tanto del iPhone, iPod touch, iPad como de Mac y PC acepta cookies sólo de sitios que han sido visitados por el usuario y bloquea el resto. Entre las que son bloqueadas se encuentran las cookies de las redes de publicidad y otros sistemas de seguimiento, pero si el usuario interactúa con la publicidad o formulario se hace una excepción a la regla.
El código de Google en cuestión es parte del botón +1 integrado desde el año pasado en los avisos de su red publicitaria. Google asegura que no era intención del diseño del sistema +1 violar la privacidad de los usuarios e instalar una cookie en sus computadoras.
Al implementar el sistema +1 en sus publicidades Google se dio cuenta que por defecto el navegador Safari de los populares iPhone, iPod touch y iPad bloqueaban los sistemas de seguimiento y no tenían forma de saber si un usuario había iniciado una sesión en Google. Es por esto que inventaron un elaborado método que engaña al Safari haciéndole creer que el usuario ha completado y enviado un formulario, y de esta forma evita las restricciones.
El problema es que una vez que han colocado la cookie, Safari permite la instalación de más cookies de ese mismo. Por lo tanto las próximas publicidades de Google si rastrearán los movimientos del usuario.
Apple ha informado que son conscientes de que algunos terceros están eludiendo las características de privacidad de Safari y están trabajando para poner fin a esa situación.
Las versiones futuras de Safari podrían incorporar una solución al problema enviada por dos ingenieros de Google a Webkit, el software sobre el que están fundados los navegadores Safari de Apple y Chrome de Google.